jueves, 19 de abril de 2012

Thanks God it's Telva!






Acabo de pasar una tarde gris y oscura donde ¡milagro! me he encontrado así, como de propina, con un par de horas por delante para mí sola. Me he puesto a navegar por internet que, después de comer bocadillos de panceta (me la acabé ayer ¡una lástima!), es mi deporte favorito.


Tras leerme un par de periódicos de tirada nacional, me pongo a escribir una nota manuscrita a mi familia y allegados con mis últimos deseos y un consejo: sacar los cuatro duros del banco y meterlos en el calcetín como el tío Aurelio (¡pero por favor lavarlo antes!). Qué situación tan deprimente, no hoy por dónde tirar... Pero pensando en cosas deprimentes me acuerdo de la braga-faja que llevo puesta y me digo ¡aún no ha llegado el día! ¡no puedo suicidarme en braga-faja y que venga un Juez de guardia macizorro a levantar mi cadáver y yo con las vergüenzas al aire! Asi que como me daba pereza cambiarme de refajos, cambio de humor y cambio de web. Guardo mi carta de últimas voluntades que una nunca sabe cuándo la va a necesitar de verdad.


Decido pasearme por una de esas webs dedicadas a la mujer, a ese concepto de "miembras" de la especie femenina. Y entonces, en portada, éste titular acapara mi atención ya fugaz de por sí.

Maquillaje y Peinados exprés: del trabajo a un cóctel

¡Vaya! ¿Puede haber artículo más útil? Me pregunto. Se me ocurre uno del tipo cómo-hacer-del-jamón-verde-del-fondo-de-la-nevera-unas-jugosas-croquetas... Pero ¡dónde va a parar al lado de éste!


El artículo empieza con un impactante "Ha llegado el día D y la hora H" y me digo, "prometedor, parecía un tonto artículo para tontas pero resulta que nos van a contar curiosidades de la II Guerra Mundial", pero acto seguido leo "Bea y Gloria, salen de fiesta juntas".


Mi teoría al garete, no sé porqué no me sorprendo. Sigo leyendo entre curiosa y enfurecida.

"Llueve, hace frío y no sabemos ya ni qué ponernos. Pero hoy nos vamos de fiesta después del trabajo, nada nos importa que llueva y nosotras vayamos en sandalias y sin medias (antes muertas que sencillas y, por favor, estamos en abril), nos lo vamos a pasar en grande."

Con dos huevos. Menos mal que van después del trabajo y no cuentan una trola y se van a media tarde.


"¡Peligro! Atención a todas las unidades dos locas beauty se escapan y pretenden demostraros cómo 'tunear' vuestro look del trabajo en un look perfecto de cóctel."

¿Dos locas beauty? ¿No sería mejor dos gilipollas directamente? Pero vamos a ver, ¿quién en su sano juicio invitaría a este par de descerebradas a su cóctel? ¿Urdangarín?

Oficialmente de mala leche, me entrego a la lectura completa del artículo cual puerco regocijándose en su charco.


"Gloria os enseña cómo repasar y marcar vuestro maquillaje de día para convertirlo en uno de noche. Os propone dos versiones: desdibujando la raya del ojo o con sombritas de ojo - para las que tengáis más tiempo-. El toque final, labios madreselva. ¡WOW!¨.

Uno- Sólo le pido a Dios que esta tal Gloria no haya recibido honorario alguno por desempeñar esas dudosamente honrosas acciones.

Y dos- ¿qué es madreselva? ¿una planta? ¿me tengo que poner unas hojas de parra en la boca?


Sigo. Ya no me para nadie.

"Bea nos da una solución para evitar esos malos pelos con los que salimos de la oficina todos los días, un peinado sencillo y súper chic. Sólo necesitáis una cinta del pelo, horquillas y laca de fijación extra fuerte. ¡Listas en 5 minutos!"

Es en este punto cuando me entran ganas de ponerme en contacto con la redacción de la revista para conseguir hablar con la tal Bea.

Uno- no salgo con esos malos pelos de la oficina todos los días, porque no tengo oficina. No tengo trabajo, y por ende, no tengo esos graves problemas. ¡De la que me he librado! ¡Y yo que me deprimía por épocas por no currar!

Y dos- no soy estilista, pero si te peinas por la mañana (partimos de la base de que tienes el pelo limpio) y te pones una coleta, la coleta seguirá ahí por la noche. Vamos a ponerlos en lo peor, te vuelves a peinar y te haces la coleta de nuevo. Voilà! Le acabo de ahorrar a la tal Bea 4 minutos (Dios sabe en qué los gastará...) Así para otra vez no tendrá que ir a la oficina cargada con los ingredientes con los que McGyver te arreglaría el conflicto con Argentina en un periquete.



No contenta con este ejercicio de masoquismo, sigo hasta el final. Siguiente frase que nos espetan las dos locas beauty más anchas que nadie.

"Queremos saber qué hacéis vosotras cuando tenéis sólo 5 minutos para retocar vuestro maquillaje y transformar vuestra cara de acelga pocha tras ocho horas delante del ordenador en una lechuga fresca y hermosa."


Cara de acelga pocha la tuya, maja. Que además adjuntáis fotos que confirman tales rumores. Y seguro que no son después de pasar ocho horas delante de un ordenador sino posando toda la tarde para vuestro estúpido reportaje.

"Mañana, si la cosa se da bien, os colgaremos las fotos de nuestro afterwork pasado por agua ;·)"

Fin.

Me quedo con sentimientos encontrados. Por un lado me entra la vena hermanastra-de-la-Cenicienta y me dan ganas de arrancarles su ropa y dejarla hecha harapos, y por otro... ¡tengo ganas de ver qué tal ha ido! Porque las pobres qué meritazo. Trabajan (que ya es bastante) con cara de acelga y luego ¡horror! ¡Sólo tienen cinco minutos para adecentarse!

Después de salir en pijama a la calle, mi siguiente pesadilla más común.


Y se adecentan ¿para ir a un dramático funeral? ¡Noooo! ¡Tienen que irse a un cóctel! Gracias a Dios han transformado la acelga que llevan dentro en lechuga Florette, que es lo más importante para que una chica se sienta segura para afrontar el duro reto que supone ser invitada a un cóctel. No olvidéis que además ¡han tenido que disimular que se lo pasaban bien! En plan fingiendo reirse y saludando a maromazos, etc.... Desde luego, qué meritazo, chica.


Y yo en casa con los niños, el lavaplatos por recoger, la Renta por hacer y la plancha que se me ha escondido sola del miedito que le da la pila de ropa que la mira amenazante. Hay que ver qué haría yo sin el Telva.



Hasta pronto pequeñ@s drugos...

lunes, 16 de enero de 2012

Encuentra las siete diferencias


Hacía bastante tiempo que no sacaba mi lado más puramente frívolo a pasear, sí, el de los trapitos. Así que en vista de que ayer se celebró una fiesta cualquiera de esas entre actores de los que no paran de premiarse unos a otros me llamó la atención una cosa.

Os lo voy a tener que explicar a través de fotos. Os voy a enseñar una sucesión de ellas, en las que curiosamente, vosotros podéis ver una serie de artistas-actrices-famosas en la alfombra, y en las que, literalmente, yo no veo nada.















El color nude es invisible a mis ojos. ¿Quién dijo que está de moda? ¿que es lo más in? ¿quién gana dinero por ir soltando esas falacias por el mundo impunemente? ¿quién dice que favorece? ¿¿¿¿¿Que FAVORECE????? ¡Pero qué cosa más saboría! Me dan ganas de meterles un tupper de lentejas bien calentitas en sus glamourosos "clutch" para ver si se les suben los colores al tomarlas gracias al vaporcillo del chori... ¡un poco de vidilla hombre por favor! ¡que demuestren que hay vida después del bótox!


En fin, mi reto, después de ver todas las imágenes, es que alguien consiga acordarse del nombre de alguna actriz (cada vez conozco a menos gente, por cierto...), o de un corte de vestido o lo que sea... para mí son tooooooodos iguales. Da igual una lentejuela de más, que una pluma o un lazo... me provocan el mismo tamaño de bostezo... para mí, listas para jugar a las 7 diferencias...

Hasta pronto pequeñ@s drugos...

jueves, 12 de enero de 2012

El portal de Belén y su fauna


A unos, en las Navidades les da por disfrutar, a otros por rezar, a otros por deprimirse, a otros por gastarse la pasta que no tienen, a otros por emborracharse a la mínima.... y a mí me da por, aparte de los puntos d) y e), por reflexionar. ¡Cómo no!

Os voy a hacer partícipes de mis particulares "misterios sin resolver".

Mi primera incógnita tiene que ver precisamente con el portal de Belén. Yo lo miro, y lo remiro, y veo al niño, a su familia, flora, fauna... y me pregunto lo siguiente: ¿por qué celebramos los Reyes el día 6 de enero? Me explico.

Como Jesús y María no encuentran cobijo deciden quedarse en el portal a tener al niño. Hasta ahí, aceptamos pulpo. El niño nace el 25 de diciembre. Todos de acuerdo.


¿Y los Reyes Magos tardan 12 días en llegar? O lo que es lo mismo, ¿la familia recién formada se tira 12 días tirada en el portal esperando a que los Reyes les traigan los regalos, que todo sea dicho, no parecen muy útiles para un un recién nacido? ¿ahí, a la intemperie? ¿en pleno diciembre? Qué frío, ¿no? Porque en la Biblia no hay noticias que mientras se mudan a un piso a esperarles, ¿no? Porque uno de protección oficial seguro que les tocaba, con su situación socioeconómica...


Cada vez que miro un Belén ¡me da una pena! ¡qué penurias! Para el año que viene les hago mantitas a todos... ¡o les pongo unas velitas para que estén calentitos!

Y luego están el buey y la mula... qué mala suerte, chico... ¿no podían haber sido un caballo y una vaca? Mientras la vaca les da leche, el caballo puede ayudarles con la mudanza...
Hablando de mulas y bueyes... no veáis la que tengo yo liada con esta pandilla de animales. ¿Quién es el marido de la mula? Y hasta lo que yo sé el buey es un toro castrado... ¿pero de quién es hijo? ¿de un caballo y una vaca? Porque el caballo se lo monta (y nunca mejor dicho) con yeguas, pero éstas a su vez también se cruzan con burros. Así que las yeguas pueden tener hijos caballos, o hijos mulos. Vamos, que son las precursoras de Brangelina y su familia multirracial. Un caballo y una mula, hermanos por parte de madre.


Y la cosa no acaba ahí, porque si una mula tiene un hijo nace un potro, ¡no otra mula! Un lío.

Así que tenemos que vacas y toros tienen hijos vacas y toros, salvo que al pobre angelito lo castren y sea buey, en cuyo caso la línea descendiente termina con él, y lo mejor que podemos hacer para honrar su memoria es encender la plancha, que están de vicio.

Caballos y yeguas tienen más caballos y yeguas. Sin excepción.


Pero yeguas y burros o asnos, tienen mulos y mulas. Los mulos no sé porqué son estériles, pero en cuanto a las mulas ¿quién las fecunda? ¿caballos? ¿Y los burros y asnos también son "razasexuales" o sólo se lo montan entre ellos? Y que sepáis que los caballos también se lo montan con burras... hay que ser degenerado...

En fin, tras esta orgía equina, paso a otra ovina.


Las gallinas ponen huevos. Los huevos son pollitos sin formar. Me seguís hasta aquí ¿no?

Bien, para que un huevo sea un futurible pollito, la gallina ha de estar fecundada, porque hasta lo que yo sé, las féminas todavía necesitamos de macho para reproducirnos.


Entonces, ¿cuántas veces ha de chingar la gallina para poner un huevo al día? ¿Todos los días? ¿de un bis-a-bis entre gallina y gallo, cuántos huevos salen? ¿Puede una gallina virgen poner huevos? ¿Por qué tienen entonces las pobres fama de "pilinguis"? "Eres más p--- que las gallinas"... ¿Son los gallos los Nachos Vidales del reino animal?


Sigo. ¿Qué diferencia hay en el huevo que nos comemos de una gallina fecundada y de una gallina virgen? ¿Qué rayos nos venden en el supermercado? Además, ¿porqué en el supermercado nunca están en la nevera y cuando llego a casa corro histérica a guardarlos en tal electrodoméstico para que no se estropeen?



En fin, pequeños drugos, me imagino que se me nota que soy una blogger de ciudad y que no he tenido mucho contacto con los animales (aparte del del plato y la olla, que de esos siempre que puedo...) ni con pesebres, así que pido PERDÓN por mi más completa ignorancia al respecto, ahora si alguien tiene huevos (nunca mejor dicho) de aclararme el lío tan monumental que tengo en la cabeza, ¡¡será más que bienvenido!!

Hasta pronto mis pequeñ@s drugos...




miércoles, 21 de diciembre de 2011

El tiempo no es oro, es bronce...




Mira que España es un desastre, ¡somos lo peor! El otro día hablaba con unos guiris que no se podian creer que en España si quedas a cenar a las 22, NADIE absolutamente NADIE estará a esa hora. Todo españolito con su RH en orden, entiende que 22h son a partir de las 2230h, no?


Esa no-puntualidad (o desfachatez) que nos caracteriza ocurre igual en todo el sector servicios en general: si te van a traer un paquete "¿señora va a estar usted en casa desde las 8AM hasta las 21PM?" Como un arresto domiciliario, y a veces tonta de ti, no te especifican el día, y tú sobreentiendes que es mañana pero el jueves ya te vas dando cuenta de que no... (la de la foto sonríe porque es una modelo y eso es un anuncio, esa posibilidad en la vida real no existe).


Por no hablar de plazos en la administración, devolución de impuestos, los años de Anita Obregón... Podemos decir que tenemos otro concepto de la palabra "tiempo".

(aquí Anita Obregón sonríe porque no entiende de qué hablo...)


Eso sí, la única cosa en la que España es puntual a prueba de bombas, que no falla ni en una casa ni un local por todo el territorio peninsular, es en la hora de comienzo de una obra que tenga TU VECINO (en la tuya propia aparecen una semana más tarde, y luego se retrasan otros tres días porque aun no les ha llegado el material...). Siempre que un vecino mío tiene una obra, aprovecho para sincronizar todos los relojes de la casa con el Big Ben, vía la taladradora del capataz. Al primer sonido, 09:00AM UTC/GMT +1.



Y es que no sabemos lo que tenemos hasta que lo perdemos. La semana pasada se me rompió la tele. Se murió. Dejó de respirar. Y así, sin más, se fundió.


Tras varios intentos fallidos con el desfibrilador descarto cualquier posibilidad de ñapa casera, y llamo a unos ñapas profesionales. Me mandan al "técnico" que viene a por la tele unas cuatro horas más tarde de lo acordado. Pero se han debido confundir porque en su lugar se presenta en mi casa un afable ancianito al que tengo ganas de invitar a tomar un caldito y luego echarnos un dominó. En cualquier caso se lleva la TV que al caso es lo que a mí me importa (su nieto estará malo y con los tiempos que corren no querrá dejar de hacer el trabajo pendiente, me digo a mí misma).


Puntualmente (¡milagro!) al día siguiente me llaman y me cuentan que a la tele no le pasa nada, que a veces les pasa eso, que ha llegado al taller funcionando, pero que no obstante la harán algunas pruebas. Quedan en llamarme al día siguiente.

Martes.
Miércoles.
Viernes.

Siete días mas tarde llamo hecha un basilisco.

- Señora dígame el número de avería que le asignó el técnico que se personó en su domicilio

- ( ¿el técnico? ¿ese afable ancianito realmente era el técnico?) numero 123/11
- ahhhh, ya señora, verá, al televisor no le pasa nada, pero sigue en observación.
- ¿En observación? ¿Asi que lleva una semana en observación? Me está diciendo usted entonces que llevan ustedes una semana VIENDO mi television, no? ¿O es que tienen ustedes una UCI de televisores?

En fin, finalmente quedamos en que el "técnico" me trae la TV a casa otros tantos días más tarde (pa mi que coincidía con el Madrid-Barça y querían ver el partido en una super-plana mientras me seguían facturando horas de trabajo, ya que efectivamente la estarían observando...).


Total que aquí llega nuestro hombre. Que es verle y me dan ganas de darle un Werther's Original para que recuerde su infancia. Como puede me trae la tele hasta el enchufe tras desconfiar de los mismos cables que él mismo dejó en su sitio, decirme que sobraban dos (le indico inmediatamente dónde se colocan, el hombre asiente a regañadientes) y una vez ya colgada en la pared, más ancho que largo me dice el ancianito:

- Bueno, señora, y esto ahora, ¿Cómo se enciende?




En mi cerebro se abre una brecha espacio/tiempo y del estupor, me quedo mirándole fijamente en silencio durante unos 10 segundos...


Sigo mirándole absorta de pupila a pupila cuando descubro que mi dedo se ha ido a pulsar ese botón redondito y gigante que pone ON/OFF. Cuando suena el típico "tiruri" de mi tele cuando se enciende, al abuelete se le pone la misma cara de ilusión que cuando se sacó el carnet de conducir.

Comprobado que todo funciona perfectamente (ahora CREO en los milagros) el señor me pasa la factura. Un chollo. Son 80€ más desplazamiento. Unos ciento y pico. ¡Y me tiene que parecer la bomba! Vamos, el señorín me dice que hay gente que paga 180€, 200€... Que lo mío es una ganga! (en mi cabeza resonaban sin parar las palabras de "a la tele no le pasa nada" "son cientoypico eurazos" "señora, es una ganga...")


En fin sin más comentarios, y con la cartera más flaca, despido al abuelete empezando a reflexionar sobre... Oh oh... Empieza la taladradora de abajo... Me voy al reloj del horno que se me ha desajustado unos minutos...

Hasta pronto pequeñ@s drugos...